Adopción de VENUS

Cuando decidimos adoptar un gato, desde el primer momento tuvimos claras tres cosas:
1) que sería a través de una Protectora,
2) que sería un gato, o gata, joven o adulto. No queríamos cachorros porque su cuidado requiere un tiempo y dedicación que no podíamos darles. A demás de que sabemos que los jóvenes y adultos tienen menos interesados. Una pena, hay gente que debería mirar más allá de lo "mono" que pueda ser un bebé.
3) que no sería sólo un gato quien se uniera a nuestra familia, si no dos.
De esta forma llegaron a nuestras vidas primero Kaimel y un mes más tarde Suri (antes Venus), una princesita naranja que vino de la mano de Vydanimal, y que desde que entró a formar parte de nuestra familia, no ha dejado de demostrarnos lo cariñosa y dulce que es.
Estamos muy felices de tener el privilegio de compartir nuestro día a día con estos dos seres tan especiales.
La verdad es que son tantos los sentimientos, que me daría para escribir un libro.
Gracias por hacerlo tan bien.